Si el Estado quiere terminar 2009 con un déficit que no supere los $ 8.777 millones, deberá recaudar $ 53.516 millones en los próximos sesenta días.
El dato surge de la previsión sobre la que se calculó el Presupuesto 2010 y los ingresos y los gastos registrados hasta el 25 de octubre, publicados en el sitio web del Ministerio de Economía. Pese a que el Estado viene recaudando un promedio mensual de $ 18.000 millones, se deberían percibir $ 26.758 millones tanto en noviembre como en diciembre. Especial El Auditor.info.
La posibilidad de un resultado financiero deficitario aparece en el Mensaje 291/09 del 15 de septiembre, un documento adjuntado al proyecto de Ley de Presupuesto 2010. En uno de los capítulos de ese documento, figura un cuadro que detalla, por un lado, la ejecución presupuestaria registrada en el primer semestre de 2009 y, por el otro, un cálculo sobre cómo podría terminar este año (ver imagen).
Justamente en esa proyección se estima que la Administración Nacional cerrará 2009 con una recaudación de $ 234.139 millones, aunque habrá erogaciones por $ 242.917 millones. Es decir que el resultado financiero, la diferencia entre los recursos y los gastos totales, será de -$ 8.777 millones. Todo, si se cumplen los cálculos sobre la recaudación.
Según la “información al ciudadano” publicada en la página de internet del Ministerio de Economía, hasta el 25 de octubre el Estado lleva recaudados $ 180.623 millones, un promedio de $ 18.000 millones mensuales. Por lo tanto, para cumplir con las previsiones del Mensaje 291, en los próximos dos meses tendrían que ingresar $ 53.516 millones. Esto equivale a decir que, aún con un resultado financiero deficitario, se necesitan recaudar $ 26.758 millones en noviembre y la misma cifra en diciembre, lo que representa más de $ 12.000 millones por encima del promedio mensual de ingresos registrados hasta octubre.
http://www.elauditor.info/mon_pres_amp.php?id=57
Cuando leí esta noticia me acordé de la película Zorba el griego, cuyo protagonista se patina todo el dinero y con el que le queda hace una obra que se desmorona toda.
Y no es por esta escena sino por la que creyendo muerta a la protagonista entran las mujeres para ver con qué pueden quedarse. Eso parecen los piquetes, el fin de la nada. El reparto de lo que no queda: la Kaja.