El desaliento es mal consejero

Cierta vez se corrió la voz que el diablo se retiraba de los negocios y vendía sus herramientas al mejor postor. En la noche de la venta, estaban todas las herramientas dispuestas en forma que llamaran la atención, y por cierto eran un lote siniestro: odio, celos, envidia, malicia, engaño... además de todos los implementos del mal.
Pero un tanto apartado del resto, había un instrumento de forma inofensiva, muy gastado, como si hubiese sido usado muchísimas veces y cuyo precio, sin embargo, era el más alto de todos. Alguien le preguntó al diablo cual era el nombre de la herramienta. -"Desaliento" fue la respuesta.
"¿Por qué su precio es tan alto?" le preguntaron.
-Porque ese instrumento-respondió el diablo- es el más útil que cualquier otro; puedo entrar en la conciencia de un ser humano cuando todos los demás me fallan, y una vez adentro, por medio del desaliento, puedo hacer de esa persona lo que se me antoja. Está muy gastado porque lo uso casi con todo el mundo, y como muy pocas personas saben que me pertenece, puedo abusar de él.
Como el precio de desaliento era tan, pero tan alto, aun sigue siendo propiedad del diablo.
http://findesemana.blogspot.com/2010/05/de-la-curiosidad-al-desaliento.html

Una sociedad desalentada puede llegar a elegir lo que le hace mal como por un sentido de humor negro. Como jugando una rayuela, en la que el cielo, está "más allá". No caigamos bajo esa arma tan poderosa. Mantengamos la esperanza intacta.
Foto:Andy Wright from Sheffield, UK