Querido José Luis:
Te pongo estas líneas para que sepas que estoy viva. Te escribo despacio porque sé que tú no puedes leer de prisa.
Bueno, no vas a reconocer la casa cuando vengas, porque el otro día tu padre leyó que según las encuestas, la mayoría de los accidentes ocurren a un kilómetro de casa, así que nos hemos mudado más lejos.
Por fin hemos enterrado a tu abuelo, encontramos su cadáver con eso de la mudanza, estaba en el armario desde aquel día en que nos ganó jugando a las escondidas.
Tu padre vive como ausente, no oye nada a pesar del aparato que le ha encomendado el médico para su sordera.
El tiempo aquí no es tan malo; la semana pasada sólo llovió 2 veces. La primera vez por 3 días y la segunda por 4 días.
Tu hermana Julia, la que se casó con su marido, por fin tuvo un hijo, pero como aún no sé si fue niño o niña, no te puedo decir si eres tío o tía.
Al que no hemos visto por acá es al tío Juan, quien se murió totalmente el año pasado.
Que te digo?.. Tu primo Numa siempre se creyó que era más veloz que los toros, ya comprobó que no.
Qué crees? Tu hermano Manuel cerró el auto con seguro y dejó las llaves adentro; tuvo que ir a pie hasta la casa por el duplicado para sacarnos a todos del automóvil.
Por cierto, que tu primo Paco se casó y resulta que le reza todas las noches a la esposa, porque es virgen.
Todos te extrañamos mucho, pero mucho más desde que te fuiste. Tienes que escribirnos contándonos que tal te va con tu nuevo trabajo. .
Bueno hijo , no te pongo la dirección porque no la sé, resulta que una familia que vivió por acá, se ha llevado los números a su nueva casa para no tener que hacer el engorroso cambio de dirección.
Esta carta te la mando por Manolo que va mañana por allí. A propósito, ¿puedes ir a buscarlo al aeropuerto?
Si ves a Doña Remedios, dale saludos de mi parte; si no la ves, no le
digas nada.
Tu madre que te quiere.
P.D. Te iba a mandar 100 dólares, pero ya he cerrado el sobre
Querida Madre:
Mamá, si recibes esta carta es porque te llegó, sino avísame y te la mando de nuevo. Recibí tu carta que mandaste con el primo Manolo, pero como el muy bruto me la entregó al día siguiente de haber llegado, ya no pude ir por él al aeropuerto.
Te cuento que los u$s. 100 no los recibí a pesar que pensaste en mandármelos pero lo que me alegró mucho es saber que estás viva.
A lo mejor no entiendes mi letra, pero es que te hecho caso y estoy escribiendo lo más rápido que puedo.
Sabes, a mi no me extraña nada lo del abuelo, siempre se me hizo muy sospechoso que el closet se hubiera atrancado por dentro.
Yo si sé por que no te oye papá, tiene la radio de transistores que yo iba a traerme en lugar del aparato para la sordera que pusiste en mi maleta. No te culpo, son tan parecidos que cualquiera se confunde, yo me pasé seis meses creyendo que como la radio la compré allá, aquí no se podía oír.
Dile a Julita que muchas felicidades por el bebé, y que me diga cuanto antes si fue niño a niña, porque si ya soy tía tendré que afeitarme el bigote.
No le he dado tus saludos a Dona Remedios porque no la he visto, pero esta mañana he hablado con ella por teléfono y está bien.
A mí me ha ido regular, el primer trabajo que tuve duré solo tres días. Me contrataron para pintar la raya blanca de una carretera, el primer día he pintado 5Km, el segundo 3Km y el tercero sólo he pintado 1Km, el capataz me dijo que estaba yo despedido, porque cada día pintaba menos, y yo le dije, hombre claro, como que cada día me queda mas lejos el bote de pintura.
Ahora estoy trabajando como dependiente de una farmacia, pero ya voy a renunciar porque me he enterado que la policía está haciendo redadas de fármaco-dependientes.
Bueno mamá, no te pido que me saludes a papá porque no te va a oír, pero recibe el cariño de tu hijo Venancio.
P.D. Puchica! Espero que el cartero sepa la dirección.
Como dije cuando hablé del humor de los leperos, me gustaron estas cartas por sus confusiones. Ya circularon por internet pero vale la pena conservarlas, no les parece?
27 sept 2010
Correspondencia entre una madre y su hijo
Publicadas por Stella Maris Coniglio a la/s 2:27 p.m.
Etiquetas: cartas, día de la madre, el hijo pródigo, humor, Stella Maris Coniglio
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