Esto parece una exageración y no se puede afirmar del todo como exageración. Ya a algunos les conté sobre la conversación que escuché en un ómnibus donde un chico de unos siete u ocho años viajaba, con su maestra y unos 5 compañeritos, conversando lo suficientemente fuerte para ser escuchados por todos. Su comentario: Seño, cuando sea grande voy a trabajar de ladrón.
Se acuerdan en el 2003?. Los chicos querían trabajar de piqueteros, una carta bien redactada mostraba lo que podía pensar un niño sobre su futuro.
http://utopiasargentinas.blogspot.com.ar/2009/06/cuando-sea-grande-quiero-ser-piquetero.html
Parece ser que eso ya no apasiona y la criatura del colectivo lo describía con razones y todo. Lo tenía muy claro. Quería ser como mi tío que le roba la cartera a las mujeres, en la que guardan sus AHORROS. La maestra con calma le explicaba que ese no era un TRABAJO y que su tío estaba preso por robar. Pero el niño, con su objetivo tomado respondía: pero mi tío sale hoy....o...mañana.
Y levantando su piernita mostraba, con ojos encendidos, cómo con una patada de karate rompía el vidrio de un auto y así obtenía esa cartera que poseía AHORROS.
Ya no hay cultura de trabajo y ni siquiera de piquetero. Se puede ser PUNTERO y recaudar. Pero ya resulta más interesante sacarle al que produce. Ya lo ven como un trabajo, con sus técnicas, con su rutina y con su impunidad. Toda una nueva manera de pensar que está cambiando a nuestra sociedad.
Mientras el que ahorraba ya gasta todo porque de nada sirve ahorrar algunos buscan la manera de sacarle el producido de su esfuerzo.
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