26 mar 2015
China está dominando el mundo?
La película "Dios mío,qué hemos hecho?" puede ser vista desde
un punto de vista cultura y religioso porque un matrimonio francés muy
tradicional, católicos practicantes y padres de cuatro hijas, son sorprendidos cuando
sus hijas deciden casarse con un
musulmán, con un judío y con un chino. Aunque Claude y Marie tratan de
mantener una mente abierta, siguen depositando todas sus esperanzas en que su
hija menor se case por Iglesia. Esto divierte por los enredos y los esfuerzos
de adaptación que realizan todos y cada uno. A mi gusto muy buena película,
recomendable.
Igualmente sorprende otro punto de vista: cada uno de los
yernos encarnan una metáfora de las economías de sus respectivos países y en la
película el chino es el que queda mejor parado. No agrego más para aquellos que no
la hayan visto pero no está mal leer este artículo que nos pueden hacer
reflexionar:
Cómo China dominará al mundo!
Quienes van a China regresan impresionados. Un producto del
que Brasil fabrica un millón de unidades, allí en una sola fábrica se producen 40
millones.
La calidad es equivalente y la velocidad de distribución
impresionante. Los chinos colocan cualquier producto en el mercado en cuestión de
semanas, a precios que son una fracción de los brasileños. Por estos días una de las
industrias se está trasladando al interior porque los salarios de la región en
que se halla instalada son demasiado altos: 100 dólares. Un obrero brasileño gana
el equivalente a 300 dólares mínimo, que sumados a otros beneficios llega a 600
dólares. Cuando los comparamos con los 100 dólares que reciben los chinos sin
prácticamente ningún otro beneficio… nos hallamos frente a una esclavitud amarilla,
que alimentamos… ¿Horas extraordinarias? En la China … ¡Olvídelas!
La gente allí está tan agradecida de tener un empleo que trabajan
horas extras a
cambio de nada…
Detrás de esta “situación” está la gran trampa china. No se
trata de una estrategia comercial sino de una estrategia de “poder” para
conquistar el mercado occidental.
Los chinos están sacando provecho de la
actitud de los “comerciantes” occidentales, que prefieren tercerizar la producción
quedándose sólo con lo que le agrega valor: la marca. Difícilmente podrá usted
comprar en las grandes redes comerciales de los EEUU algún producto “made in USA”.
Es todo “made in China” con una marca estadounidense. Las empresas ganan riadas
de dinero comprando a los chinos por centavos y vendiendo luego por centenares
de dólares. Sólo les interesa el lucro inmediato a cualquier precio. Aun al
costo de cerrar sus fábricas y generar una brutal desocupación. Es lo que
podría
llamarse “estrategia del precio”. Mientras los occidentales
tercerizan sus empresas y ganan en el corto plazo, China aprovecha ese enfoque e
instala unidades productivas de alto rendimiento para dominar en el largo
plazo. Mientras las grandes potencias mercantiles se quedan con sus marcas, con el
diseño.. en sus garras, los chinos se quedan con la producción, asistiéndolos,
estimulándolos y contribuyendo al desmantelamiento de los escasos parques industriales occidentales.
Muy pronto ya no habrá más fábricas de zapatillas deportivas o de calzados en
el mundo occidental.Solo existirán en China.
De modo que en el futuro próximo veremos cómo los productos
chinos aumentan sus precios produciendo un “shock manufacturero” como sucedió
con el shock petrolero en los años 70. Y entonces ya será demasiado tarde.
Entonces el mundo se dará cuenta de que levantar nuevas
fábricas tendrá costos
prohibitivos y deberá rendirse al poderío chino. Se dará
cuenta de que alimentó a un enorme dragón y se convirtió en su rehén. Un dragón que
aumentará gradualmente sus precios, puesto que será quién dicte las nuevas leyes del
mercado y será luego quién mande pues tendrá el monopolio de la producción.
Ya que será también el dueño de las fábricas, de los stocks
y de los empleos y regulará los precios.Nosotros, nuestros hijos y nuestros nietos asistiremos a una
inversión de las reglas de juego actuales, lo que producirá en las economías
occidentales el impacto de una bomba atómica… china. En ese momento cuando el mundo
occidental se dé cuenta será demasiado tarde. Ese día los ejecutivos occidentales mirarán
tristemente las ruinas de sus antiguas fábricas, sus técnicos jubilados jugando a
las cartas en las plazas y llorarán sobre la chatarra de sus parques fabriles
destruidos. Y se acordarán entonces, con mucha nostalgia, del tiempo en que ganaban
dinero comprando “fardos de mercaderías de los esclavos” y vendiendo caras sus “marcas
registradas” a sus coterráneos. Y entonces, entristecidos, abrirán sus
despensas y se comerán sus marcas que ya estarán pasadas de moda y que por tanto habrán
dejado de ser poderosas, porque todas habrán sido copiadas… REFLEXIONEN.
Napoléón fue un visionario en muchos aspectos.
Su frase "Cuando China despierte
el mundo temblará" es una demostración más de su clarividencia, capaz que no aplicado a este sentido, pero nosotros estamos discutiendo Macri sí, Macri no, Scioli sí, Scioli no y no hablamos de estos temas.
En estos años nos engrupieron que la soja subía de precio porque China salía a comprar alimentos al mundo como un beneficio, poco duró el viento de cola.
Dejo este link, publicado en La Nación el 21 de abril del 2015 que amplía lo dicho:
http://www.lanacion.com.ar/1786239-donde-invierte-china-su-dinero
Publicadas por Stella Maris Coniglio a la/s 12:00 a.m.
Etiquetas: China, Dios mío, economía, Luciano Pires, poder, qué hemos hecho?
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